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Tomado de:
Iris Rangel
Jueves, 8 de diciembre de 2011
En 1498, Colon recorrió desde el rio Esequibo, pasando por
las agitadas aguas del Delta del Orinoco, hasta Macuro y el 2 de Agosto de ese
mismo año, llamó a la hermosa tierra que estaba ante sus ojos “Tierra de
Gracia”. Por eso, desde esa fecha, el territorio ubicado al oeste de la vaguada
de aquel río, denominado Guayana Esequiba, pertenece a Venezuela, la “Tierra de
Gracia”. Ese recorrido, especificado en las cartas y documentos emanados del
propio Almirante, es nuestro título originario, anterior a cualquier otro. Es
un territorio tan originariamente nuestro, como lo es por ejemplo, el Golfo de
Venezuela, descubierto por Alonso de Ojeda, el 9 de agosto siguiente.
Por eso, en mi condición de integrante de la Directiva del
Instituto de Estudios Fronterizos de Venezuela (IDEFV) y Especialista en
Historia de la Territorialidad y Fronteras de Venezuela, egresada de la
Universidad José María Vargas en la promoción Juan de la Cosa (1993), ante la
actitud que tuvo el actual gobierno respecto al comunicado de prensa de la
Cancillería Guyanesa de ampliar el limite exterior su Plataforma Continental,
conmino al gobierno de Hugo Chávez y a su cancillería, a que se pronuncie sobre
las incursiones de la República Cooperativa de Guyana en nuestro territorio
esequibo y en nuestra plataforma deltana. Y recalco firmemente los siguientes
puntos contenidos en el Comunicado del Instituto, que debe tener en cuenta el
régimen y sus personeros en relación a un tema tan delicado, so pena de
incurrir en el gravísimo delito de traición a la patria, contemplado en la
Constitución y las leyes vigentes:
Primero: Todo arreglo con Guyana que no contemple la
devolución integra a Venezuela del territorio Esequibo (la totalidad del
territorio que se encuentra al oeste de la vaguada del río Esequibo), debe ser
rechazada de plano. El territorio Esequibo no es un despojo sujeto a reparto;
es parte integral del territorio nacional, según lo contempla La Constitución
vigente de Venezuela (1999).
Segundo: El gobierno nacional debe mostrarse firme e
irreductible frente a Guyana, amparada como está la nación, en la declaración
ante las Naciones Unidas en 1962, de la nulidad del Laudo de Paris de 1899 y la
preservación de los títulos de Venezuela sobre ese territorio, por el acuerdo
de Ginebra de 1966.
Tercero: Es inconstitucional y totalmente inaceptable la
proposición que se ha adelantado, que promueve la aceptación, por parte de
Venezuela, de ceder en parte sus reclamos territoriales en el Esequibo, a
cambio de recibir el dominio de solo parte de ese territorio.
Cuarto: hay que denunciar y detener el deterioro ambiental
que Guyana esta causando en nuestro territorio Esequibo. Nuestros derechos se
encuentran amparados por el Acuerdo de Ginebra de 1966, el cual estableció que
no se han eliminado los derechos de soberanía de Venezuela sobre el territorio
reclamado; por lo tanto, mal puede aceptarse la explotación de los
recursos por parte del gobierno guyanés.
Quinto: El estado venezolano debe implementar de manera
constante, intensa y permanente, el desarrollo de infraestructuras de
comunicación, educación, salud, producción y seguridad a todo lo largo y ancho
de la zona en reclamación y reconocer oficialmente la ciudadanía venezolana a
todos los habitantes de ese territorio que comprueben haber nacido en el mismo.
Sexto: El gobierno nacional deberá condenar y denunciar ante
todas las instancias internacionales, dejando constancia del mismo, todos los
hechos de violaciones del estado guyanés al acuerdo de Ginebra de 1966.
Séptimo: El gobierno nacional debe pronunciarse sobre el
Laudo Arbitral del 11 de abril del 2006, que estableció el límite marítimo
entre Trinidad- Tobago y Guyana, por ser lesivo a la soberanía nacional de
Venezuela.
Octavo: Venezuela debe reservarse los derechos
frente a las diferentes concesiones y a los desarrollos hidroeléctricos que se
realizan ilegalmente en nuestro territorio esequibo.
Noveno: El gobierno de Hugo Chávez debe cumplir el Decreto
Presidencial No. 1152 del 9 de julio de 1968, donde se establece el mar
territorial de Venezuela, desde Punta Araguapiche, en el Estado Delta Amacuro,
hasta la desembocadura del río Esequibo, ordenando a la Marina de Guerra de
Venezuela, el patrullaje de esas aguas nacionales.
Nota del editor del blog: Al
referenciarse a la República Cooperativa de Guyana se deben de tener en cuenta
los 159.500Km2, de territorios ubicados al oeste del río Esequibo conocidos con
el nombre de Guayana Esequiba o Zona en Reclamación sujetos al Acuerdo de
Ginebra del 17 de febrero de 1966.
Territorios estos sobre los
cuales el gobierno Venezolano en representación de la Nación venezolana se
reservo sus derechos sobre los territorios de la Guayana Esequiba en su nota
del 26 de mayo de 1966 al reconocerse al nuevo Estado de Guyana .
“...por lo tanto, Venezuela
reconoce como territorio del nuevo Estado, el que se sitúa al este de la margen
derecha del río Esequibo y reitera ante la comunidad internacional, que se
reserva expresamente sus derechos de soberanía territorial sobre la zona que se
encuentra en la margen izquierda del precitado río; en consecuencia, el
territorio de la Guayana Esequiba sobre el cual Venezuela se reserva
expresamente sus derechos soberanos, limita al Este con el nuevo Estado de Guyana,
a través de la línea del río Esequibo, tomando éste desde su nacimiento hasta
su desembocadura en el Océano Atlántico...”
Mapa que señala el Espacio
de Soberanía Marítima Venezolana que se reserva, como Mar Territorial mediante el Decreto
Presidencial No 1152 del 09 de Julio de 1968.
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