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Mapa Oficial de
la República Bolivariana de Venezuela
Tomado de:
05.12.2011 05:25 AM
Divirtámonos juntos y comencemos a recordar esos hechos
inolvidables, las estupideces y actos de heroísmo que marcaron este 2011.
Luis Chumaceiro
Desde Caracas.- Antes de cualquier comentario, quiero
convocarlos para que escribamos juntos los artículos decembrinos. Se trata de
los tradicionales “La Mujer y el Hombre del Año” que vengo ofreciendo desde
hace 20 años a la consideración de los lectores y que comprenden no sólo a los
personajes sino los acontecimientos más relevantes del año moribundo.
Divirtámonos juntos y comencemos a recordar esos hechos
inolvidables, las estupideces y actos de heroísmo que marcaron este 2011.
Manden sus correos, twiters o cualquier mecanismo de comunicación con las
propuestas. No se arrepentirán.
Dicho esto no puedo dejar de iniciar esta crónica dominical
sin mencionar la espectacular e inolvidable cumbre borrascosa que nos deparó un
fin de semana largo a los caraqueños.
Lo primero que se me ocurre es criticar que no haya sido
nacional porque a los orientales nos discriminaron. También debo rechazar a los
criticones, aquellos que vieron en el feriado decretado por el Consejo de
Ministros, una palpable demostración de lo bajo que hemos caído. No estoy de
acuerdo con que el asueto de la cumbre haya sido una señal de subdesarrollo; al
contrario, hemos innovado donde nunca antes alguien se atrevió y estoy
convencido de que si seguimos dando esas alegrías a la población, los del
proceso alcanzaremos los primeros niveles de popularidad.
Somos una atracción en el mundo. Todos andan pendientes de
nosotros. No hay un noticiero en el que no aparezca una mención de lo que vive
Venezuela.
Esto es buenísimo. Hemos llamado la atención de los
investigadores más connotados que, con toda su ciencia, no atinan a explicar lo
que aquí pasa, mucho menos lo entienden. Lo malo es que los medios
internacionales, dominados por los imperios, pretenden crearnos una imagen
bananera poco cónsona con lo mucho que nos valoramos los
venezolanos.
El apellido Chávez es símbolo de especial relevancia y se
produjo el milagro de desplazar al liderazgo que un día representaron
personajes tan inolvidables como Idi Amin Dada o Gadafi. Lo único que no
entiendo es la razón por la cual mi amigo Spielberg no ha asomado una
superproducción que tenga al magnate rojo como su protagonista principal. Stone
no cuenta, está devaluado, mejor dicho, empavado igual que Sean
Connery.
Pero volvamos a nuestra cumbre, la primera de muchas
reuniones que se producirán este año.
Les doy un tubazo, Caracas será sede de otros eventos de
especial importancia. Pronto anunciarán la Cumbre de los Dictadores Comatosos,
también se producirá un Congreso de los Restos de las Farc que aún no han sido
dados de baja por el ejército colombiano y se espera un evento muy especial,
pocas veces visto, la Feria Universal de Vendedores de Chatarra. Esto sin
develar que se han hecho contactos para quitarle a Nicaragua la sede del
Encuentro Internacional de Payasos, Mimos y Chupadores del Alba, un grupo
selecto del mejor comunismo irredento latinoamericano, con invitados especiales
de España, África y los Países Árabes.
La gente del Gobierno está de lo más contenta porque, con
tantas cumbres, tendremos, más que puentes, viaductos completos de vacaciones.
Empataremos Navidad con Carnavales y el Mardi Grass con la Semana Santa. En
estos eventos se espera la entusiasta visita de los amigos de siempre: Evo,
Danielito, Correa, la señora Kitchner y otros mandatarios caribeños que han
hecho de su relación con Chávez un negocio de vida. Y es que hasta los
venezolanos lo querríamos si nos diera a nosotros todo lo que a ellos les
regala.
Pero no seamos egoístas. Tengamos un poquito de grandeza.
Seamos como ese celacanto comunista que, el pasado fin de semana, afirmó que el
destino de Venezuela es llenarnos de chinos que trabajen por nosotros porque
tenemos demasiado territorio. Él es el mismo que, hace cuatro años, propuso
renunciar a la reclamación del Esequibo en aras de la fraternidad socialista
del mundo. Y parece que en el Gobierno le hacen mucho caso. Por lo pronto, una
última recomendación: aseguren bien sus carteras que Evo y sus amigos del Alba no
terminan de irse con su arrastão a lo carioca.
Nota del editor del blog: Al
referenciarse a la República Cooperativa de Guyana se deben de tener en cuenta
los 159.500Km2, de territorios ubicados al oeste del río Esequibo conocidos con
el nombre de Guayana Esequiba o Zona en Reclamación sujetos al Acuerdo de
Ginebra del 17 de febrero de 1966.
Territorios estos sobre los
cuales el gobierno Venezolano en representación de la Nación venezolana se
reservo sus derechos sobre los territorios de la Guayana Esequiba en su nota
del 26 de mayo de 1966 al reconocerse al nuevo Estado de Guyana .
“...por lo tanto, Venezuela
reconoce como territorio del nuevo Estado, el que se sitúa al este de la margen
derecha del río Esequibo y reitera ante la comunidad internacional, que se
reserva expresamente sus derechos de soberanía territorial sobre la zona que se
encuentra en la margen izquierda del precitado río; en consecuencia, el
territorio de la Guayana Esequiba sobre el cual Venezuela se reserva
expresamente sus derechos soberanos, limita al Este con el nuevo Estado de Guyana,
a través de la línea del río Esequibo, tomando éste desde su nacimiento hasta
su desembocadura en el Océano Atlántico...”
Mapa que señala el Espacio
de Soberanía Marítima Venezolana que se reserva, como Mar Territorial mediante el Decreto
Presidencial No 1152 del 09 de Julio de 1968.
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