SILENCIO OFICIAL HA ACOMPAÑADO ACTOS HOSTILES EN EL ATLÁNTICO

Tomado del universal.com del 18 de agosto de 2008

Falta de delimitación del margen atlántico venezolano suscita provocaciones
MARIANNA PÁRRAGA
EL UNIVERSAL
La apertura de una licitación por parte de Barbados para entregar 26 áreas costa afuera en busca de hidrocarburos generó alarma semanas atrás, pero para muchos fue igualmente sorprendente la reacción del Gobierno venezolano, tras años de silencio en torno a las reiteradas provocaciones cometidas en contra de la soberanía nacional.
El ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, tildó la licitación de "completamente irregular" e informó que la Cancillería ya inició el reclamo formal del proceso, que tiene previsto recibir ofertas hasta septiembre. "A nadie le queden dudas de nuestra disposición a hacer respetar la soberanía. En ningún momento hemos pretendido dejar pasar eso. Hemos tomado acciones, pero hay canales para ventilarlo", dijo.
Barbados es uno de los pocos países que no está inserto en la iniciativa Petrocaribe, de la cual hoy se benefician 17 naciones. Esta podría ser la razón de la enérgica reacción venezolana, en contraposición al silencio que ha reinado a raíz de los agravios cometidos por otros países.
El Frente Pro Defensa del Petróleo considera que Barbados pasó por alto la prolongación trazada por el Tratado de Delimitación de Áreas Marinas firmado entre Venezuela y Trinidad y Tobago en abril de 1990, que aún se considera válido, y recordó que su actuación no es aislada, pues como parte del Caricom ha sembrado dudas con respecto a la soberanía de Venezuela sobre la Isla de Aves, incluida en el territorio venezolano desde hace 400 años.
La reacción de Barbados no es casual. En 2006 la Corte Internacional de Justicia estableció los límites entre Trinidad y Barbados, que hicieron a Venezuela limítrofe con ese país.
El Gobierno nacional no reaccionó ante la decisión del tribunal ni tampoco ante la resolución de la Corte Permanente de Arbitraje, que en septiembre de 2007 fijó las áreas marinas y submarinas de Guyana y Surinam, comprometiendo programas locales de explotación de gas costa afuera, principalmente Plataforma Deltana, que está por concluir la fase exploratoria.
Es por ello que el geólogo Aníbal Martínez, presidente del Frente Pro Defensa del Petróleo, ha reiterado la urgencia de fijar el borde del margen atlántico venezolano. Para ello ya se tienen como referencia la Ley de Espacios Acuáticos e Insulares de 2001 y el Decreto 1.152 de 1968, que cerró el delta del Orinoco.
Guyana, Trinidad y Colombia
Buena parte de las tensiones entre Venezuela y el Caribe han tenido a Guyana como protagonista, que en 1967 perforó un pozo en aguas de la Guayana Esequiba, en 1999 intentó entregar 13 millones de hectáreas en concesiones costa afuera y en 2003 firmó con Barbados un Tratado de Cooperación de sus Zonas Económicas Exclusivas Comunes que niega la proyección del delta del río Orinoco.
Aunque en 1999 Venezuela reclamó en firme la actuación de Guyana, que dio lugar a un segundo diferendo con ese país, la posición del gobierno del Presidente Chávez se ha flexibilizado notablemente con el tiempo.
En 2007 el embajador de Guyana en Venezuela solicitó al Ministerio de Relaciones Exteriores abandonar la Guayana Esequiba. Para ese momento el presidente Chávez ya había manifestado que no se opondría a exploraciones en el Esequibo y Guyana formaba parte de Petrocaribe, con una cuota de suministro de 5.200 barriles diarios de hidrocarburos venezolanos.
Un reclamo de Colombia por el bloque Castillete Noreste II, en el golfo de Venezuela, provocó en 2007 la devolución del área que había ganado la venezolana Vinccler sin mayores explicaciones y poco después se unificaron los yacimientos de Plataforma Deltana con Trinidad, pasando por alto la necesidad de unir las áreas Dragón (proyecto Mariscal Sucre) e Hibiscus, que del lado trinitario acumula años en explotación.

Nota del Editor del blog: Al referenciarse a la República Cooperativa de Guyana se deben de tener en cuenta los 159.500 Km2, de territorios ubicados al oeste del río Esequibo conocidos con el nombre de Guayana Esequiba o Zona en Reclamación sujetos al Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966.