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Tomado de:
Puerto España (PL)
La única salida para nuestros pueblos es la integración y la cooperación, no
sólo entre los Estados, sino también entre los diversos esquemas y
organizaciones regionales.
Esa frase no es de hoy, tiene nueve años y fue pronunciada en un memorable discurso por el máximo líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, en el Palacio de las Convenciones de La Habana, el 8 de diciembre de 2002.
Ese día se celebró el 30 aniversario de la decisión adoptada de manera conjunta por los gobernantes de Barbados, Errol Barrow; Guyana, Forbes Burnham; Jamaica, Michael Manley, y Trinidad y Tobago, Eric Williams, de establecer relaciones diplomáticas con Cuba.
Al adoptar esa decisión, los gobernantes de esos cuatro pequeños países del Caribe anglófono, recién estrenados en una independencia largamente deseada, "comprendían que estaban trazando el camino para lo que sería después la política exterior de la Comunidad del Caribe", dijo entonces Fidel Castro.
"Esa decisión, de incuestionable valentía política, adoptada en un entorno hostil y de grandes presiones, constituyó un paso fundamental para la ruptura del bloqueo diplomático y comercial a Cuba en la región", agregó.
Durante aquella cita en La Habana en ocasión del 30 aniversario, se celebró la primera reunión cumbre entre Cuba y el conjunto de países integrantes de la Comunidad del Caribe (Caricom), en el inicio de un ciclo de encuentros trienales que tuvo este mes en Trinidad y Tobago su cuarta edición.
A la IV cumbre, efectuada el 8 de diciembre último en Puerto España, asistió el presidente cubano, Raúl Castro, quien también resaltó la trascendencia de la decisión adoptada por Barbados, Jamaica, Guyana y Trinidad y Tobago 39 años atrás, y la consideró de gran importancia moral y educativa.
Recordó que en aquellos momentos, Cuba estaba prácticamente aislada del resto de América Latina y El Caribe desde 1962, por imposición de Estados Unidos aplicada a través de la de Organización de Estados Americanos (OEA), y sólo mantenía vínculos oficiales con México, Panamá, Chile y Perú.
En un breve discurso pronunciado en la sesión inaugural de ese encuentro, el mandatario cubano anunció a los dignatarios de los países miembros de Caricom, reunidos en la capital de Trinidad y Tobago, la celebración en 2012 del 40 aniversario de la decisión adoptada por los cuatro países caribeños.
Nos proponemos celebrarlo dedicando la Feria Internacional del Libro, el evento cultural más significativo del movimiento editorial cubano, al Caribe, sus obras y sus autores, como reconocimiento a la cultura y el pensamiento común de nuestros pueblos, explicó.
Cuba no olvidará jamás tan noble gesto y reconocerá eternamente la actitud de los líderes Errol Barrow, Forbes Burnham, Michael Manley y Eric Williams, quienes abrieron el paso a una relación basada en el respeto mutuo, la amistad y la cooperación entre los países miembros de Caricom y Cuba, dijo Raúl Castro.
LA IV CUMBRE CUBA-CARICOM
Como las tres anteriores, efectuadas sucesivamente en La Habana, Bridgetown (Barbados) y Santiago de Cuba, la cumbre de Puerto España fue escenario propicio para ratificar la voluntad compartida de continuar reforzando la colaboración bilateral y de ampliarla y diversificarla en beneficio de los pueblos de la región.
Durante el desarrollo de esta IV cumbre, el presidente cubano y los dignatarios de los estados de la comunidad caribeña se reunieron a puertas cerradas para examinar un amplio abanico de temas.
Entre otros fueron citados los riesgos del cambio climático para los estados insulares, la integración regional y hemisférica, la energía renovable sostenible, la mitigación de desastres, la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y el tráfico de armas y el desarrollo sostenible.
Pero sobre todo, fue revisada la marcha de la cooperación entre Cuba y los países miembros de Caricom, y se analizaron las perspectivas de revitalización de las relaciones entre las dos partes.
Al término de esos intercambios, fue aprobada la Declaración de Puerto España, documento en el que se resumen los acuerdos adoptados.
La Declaración enfatiza que la cooperación entre Cuba y los países de la Comunidad del Caribe en salud, deporte, educación y capacitación de los recursos humanos, "ha contribuido de manera efectiva al logro de nuestros objetivos de desarrollo sostenible y a un mayor bienestar de nuestro pueblos".
En ese sentido, los dignatarios participantes en la cumbre renovaron el compromiso de fortalecer la cooperación comercial y económica entre ambas partes.
También la declaración recoge el compromiso de Cuba y de los países miembros de Caricom de cooperar en la lucha internacional contra el tráfico de drogas, y la condena al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
Sobre este último aspecto, el texto aprobado en la cumbre reitera la demanda al gobierno estadounidense de que considere favorablemente la solicitud de extradición del terrorista Luis Posada Carriles, formulada por Venezuela.
Posada Carriles es uno de los responsables del derribo en vuelo de un avión de Cubana de Aviación en 1976, que provocó la muerte de 73 personas, además de otras numerosas acciones terroristas contra Cuba, pero permanece en Estados Unidos, donde goza de total libertad.
EL CARIBE CONTRA EL BLOQUEO DE EE.UU. A CUBA
Los gobernantes participantes en la cumbre reafirmaron "nuestro fuerte rechazo del injusto y cruel bloqueo económico, comercial y financiero contra la república de Cuba y las medidas extraterritoriales dirigidas a extender el alcance del mismo a terceros países", expresa la Declaración de Puerto España.
A ese pronunciamiento se sumó una declaración especial referida específicamente a este tema, como consecuencia de la materialización, en ocasión del evento, de la política estadounidense de hostigamiento contra la mayor de las Antillas.
Esta IV cumbre estaba prevista sesionar en el hotel Hilton de Puerto España, una edificación propiedad del gobierno de Trinidad y Tobago, pero operada por esa cadena hotelera estadounidense, donde, además, se alojarían todas las delegaciones participantes.
Pero la dirección del hotel se negó a prestar la instalación para realizar el evento y a alojar a la delegación cubana, en aplicación extraterritorial de la Ley Helms-Burton, que reforzó el bloqueo aplicado por Estados Unidos contra la Isla desde hace más de medio siglo.
Por esa razón, la delegación cubana se alojó en otro hotel capitalino y la cumbre se efectuó en la moderna sede de la Academia Nacional de Artes Escénicas (NAPA, por sus siglas en inglés) de Trinidad y Tobago.
En la declaración especial sobre el tema, los participantes en la cumbre calificaron esa acción de una unilateral e injustificada aplicación extraterritorial por parte de Washington de la ley Helms-Burton, que -recordaron- es contraria a la Carta de las Naciones Unidas y al derecho internacional.
LA VISITA OFICIAL
La participación de Raúl Castro en la IV cumbre Cuba-Caricom fue precedida de una visita oficial del presidente cubano a Trinidad y Tobago, acompañado de una comitiva integrada por Ricardo Cabrisas, vicepresidente del gobierno, y por los titulares de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, y de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.
La apretada agenda de trabajo incluyó conversaciones oficiales con el presidente George Maxwell Richards, y con la primera ministra, Kamla Persad-Bissessar.
En el encuentro con la jefa del gobierno, ambas partes analizaron "problemas profundos de nuestras relaciones, pero sobre todo pensando en el futuro", según dijo después el presidente cubano.
Fueron dos días de intenso trabajo para la delegación cubana, durante los cuales se manifestó nuevamente la fortaleza de las relaciones entre Cuba y los países de la Comunidad Caribeña, y la voluntad común de profundizar, ampliar y diversificar la cooperación y la solidaridad entre las partes.
El Caribe siempre podrá contar con la eterna amistad, el desinterés, la gratitud y el apoyo pleno y total de sus hermanos cubanos, había dicho Fidel Castro en 2002.
*Corresponsal de Prensa Latina en Venezuela. Enviado especial a Trinidad y Tobago.
Esa frase no es de hoy, tiene nueve años y fue pronunciada en un memorable discurso por el máximo líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, en el Palacio de las Convenciones de La Habana, el 8 de diciembre de 2002.
Ese día se celebró el 30 aniversario de la decisión adoptada de manera conjunta por los gobernantes de Barbados, Errol Barrow; Guyana, Forbes Burnham; Jamaica, Michael Manley, y Trinidad y Tobago, Eric Williams, de establecer relaciones diplomáticas con Cuba.
Al adoptar esa decisión, los gobernantes de esos cuatro pequeños países del Caribe anglófono, recién estrenados en una independencia largamente deseada, "comprendían que estaban trazando el camino para lo que sería después la política exterior de la Comunidad del Caribe", dijo entonces Fidel Castro.
"Esa decisión, de incuestionable valentía política, adoptada en un entorno hostil y de grandes presiones, constituyó un paso fundamental para la ruptura del bloqueo diplomático y comercial a Cuba en la región", agregó.
Durante aquella cita en La Habana en ocasión del 30 aniversario, se celebró la primera reunión cumbre entre Cuba y el conjunto de países integrantes de la Comunidad del Caribe (Caricom), en el inicio de un ciclo de encuentros trienales que tuvo este mes en Trinidad y Tobago su cuarta edición.
A la IV cumbre, efectuada el 8 de diciembre último en Puerto España, asistió el presidente cubano, Raúl Castro, quien también resaltó la trascendencia de la decisión adoptada por Barbados, Jamaica, Guyana y Trinidad y Tobago 39 años atrás, y la consideró de gran importancia moral y educativa.
Recordó que en aquellos momentos, Cuba estaba prácticamente aislada del resto de América Latina y El Caribe desde 1962, por imposición de Estados Unidos aplicada a través de la de Organización de Estados Americanos (OEA), y sólo mantenía vínculos oficiales con México, Panamá, Chile y Perú.
En un breve discurso pronunciado en la sesión inaugural de ese encuentro, el mandatario cubano anunció a los dignatarios de los países miembros de Caricom, reunidos en la capital de Trinidad y Tobago, la celebración en 2012 del 40 aniversario de la decisión adoptada por los cuatro países caribeños.
Nos proponemos celebrarlo dedicando la Feria Internacional del Libro, el evento cultural más significativo del movimiento editorial cubano, al Caribe, sus obras y sus autores, como reconocimiento a la cultura y el pensamiento común de nuestros pueblos, explicó.
Cuba no olvidará jamás tan noble gesto y reconocerá eternamente la actitud de los líderes Errol Barrow, Forbes Burnham, Michael Manley y Eric Williams, quienes abrieron el paso a una relación basada en el respeto mutuo, la amistad y la cooperación entre los países miembros de Caricom y Cuba, dijo Raúl Castro.
LA IV CUMBRE CUBA-CARICOM
Como las tres anteriores, efectuadas sucesivamente en La Habana, Bridgetown (Barbados) y Santiago de Cuba, la cumbre de Puerto España fue escenario propicio para ratificar la voluntad compartida de continuar reforzando la colaboración bilateral y de ampliarla y diversificarla en beneficio de los pueblos de la región.
Durante el desarrollo de esta IV cumbre, el presidente cubano y los dignatarios de los estados de la comunidad caribeña se reunieron a puertas cerradas para examinar un amplio abanico de temas.
Entre otros fueron citados los riesgos del cambio climático para los estados insulares, la integración regional y hemisférica, la energía renovable sostenible, la mitigación de desastres, la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y el tráfico de armas y el desarrollo sostenible.
Pero sobre todo, fue revisada la marcha de la cooperación entre Cuba y los países miembros de Caricom, y se analizaron las perspectivas de revitalización de las relaciones entre las dos partes.
Al término de esos intercambios, fue aprobada la Declaración de Puerto España, documento en el que se resumen los acuerdos adoptados.
La Declaración enfatiza que la cooperación entre Cuba y los países de la Comunidad del Caribe en salud, deporte, educación y capacitación de los recursos humanos, "ha contribuido de manera efectiva al logro de nuestros objetivos de desarrollo sostenible y a un mayor bienestar de nuestro pueblos".
En ese sentido, los dignatarios participantes en la cumbre renovaron el compromiso de fortalecer la cooperación comercial y económica entre ambas partes.
También la declaración recoge el compromiso de Cuba y de los países miembros de Caricom de cooperar en la lucha internacional contra el tráfico de drogas, y la condena al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
Sobre este último aspecto, el texto aprobado en la cumbre reitera la demanda al gobierno estadounidense de que considere favorablemente la solicitud de extradición del terrorista Luis Posada Carriles, formulada por Venezuela.
Posada Carriles es uno de los responsables del derribo en vuelo de un avión de Cubana de Aviación en 1976, que provocó la muerte de 73 personas, además de otras numerosas acciones terroristas contra Cuba, pero permanece en Estados Unidos, donde goza de total libertad.
EL CARIBE CONTRA EL BLOQUEO DE EE.UU. A CUBA
Los gobernantes participantes en la cumbre reafirmaron "nuestro fuerte rechazo del injusto y cruel bloqueo económico, comercial y financiero contra la república de Cuba y las medidas extraterritoriales dirigidas a extender el alcance del mismo a terceros países", expresa la Declaración de Puerto España.
A ese pronunciamiento se sumó una declaración especial referida específicamente a este tema, como consecuencia de la materialización, en ocasión del evento, de la política estadounidense de hostigamiento contra la mayor de las Antillas.
Esta IV cumbre estaba prevista sesionar en el hotel Hilton de Puerto España, una edificación propiedad del gobierno de Trinidad y Tobago, pero operada por esa cadena hotelera estadounidense, donde, además, se alojarían todas las delegaciones participantes.
Pero la dirección del hotel se negó a prestar la instalación para realizar el evento y a alojar a la delegación cubana, en aplicación extraterritorial de la Ley Helms-Burton, que reforzó el bloqueo aplicado por Estados Unidos contra la Isla desde hace más de medio siglo.
Por esa razón, la delegación cubana se alojó en otro hotel capitalino y la cumbre se efectuó en la moderna sede de la Academia Nacional de Artes Escénicas (NAPA, por sus siglas en inglés) de Trinidad y Tobago.
En la declaración especial sobre el tema, los participantes en la cumbre calificaron esa acción de una unilateral e injustificada aplicación extraterritorial por parte de Washington de la ley Helms-Burton, que -recordaron- es contraria a la Carta de las Naciones Unidas y al derecho internacional.
LA VISITA OFICIAL
La participación de Raúl Castro en la IV cumbre Cuba-Caricom fue precedida de una visita oficial del presidente cubano a Trinidad y Tobago, acompañado de una comitiva integrada por Ricardo Cabrisas, vicepresidente del gobierno, y por los titulares de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, y de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.
La apretada agenda de trabajo incluyó conversaciones oficiales con el presidente George Maxwell Richards, y con la primera ministra, Kamla Persad-Bissessar.
En el encuentro con la jefa del gobierno, ambas partes analizaron "problemas profundos de nuestras relaciones, pero sobre todo pensando en el futuro", según dijo después el presidente cubano.
Fueron dos días de intenso trabajo para la delegación cubana, durante los cuales se manifestó nuevamente la fortaleza de las relaciones entre Cuba y los países de la Comunidad Caribeña, y la voluntad común de profundizar, ampliar y diversificar la cooperación y la solidaridad entre las partes.
El Caribe siempre podrá contar con la eterna amistad, el desinterés, la gratitud y el apoyo pleno y total de sus hermanos cubanos, había dicho Fidel Castro en 2002.
*Corresponsal de Prensa Latina en Venezuela. Enviado especial a Trinidad y Tobago.
arb/agp
Nota del editor del blog: Al
referenciarse a la República Cooperativa de Guyana se deben de tener en cuenta
los 159.500Km2, de territorios ubicados al oeste del río Esequibo conocidos con
el nombre de Guayana Esequiba o Zona en Reclamación sujetos al Acuerdo de
Ginebra del 17 de febrero de 1966.
Territorios estos sobre los
cuales el gobierno Venezolano en representación de la Nación venezolana se
reservo sus derechos sobre los territorios de la Guayana Esequiba en su nota
del 26 de mayo de 1966 al reconocerse al nuevo Estado de Guyana .
“...por lo tanto, Venezuela
reconoce como territorio del nuevo Estado, el que se sitúa al este de la margen
derecha del río Esequibo y reitera ante la comunidad internacional, que se
reserva expresamente sus derechos de soberanía territorial sobre la zona que se
encuentra en la margen izquierda del precitado río; en consecuencia, el
territorio de la Guayana Esequiba sobre el cual Venezuela se reserva
expresamente sus derechos soberanos, limita al Este con el nuevo Estado de Guyana,
a través de la línea del río Esequibo, tomando éste desde su nacimiento hasta
su desembocadura en el Océano Atlántico...”
Mapa que señala el Espacio
de Soberanía Marítima Venezolana que se reserva, como Mar Territorial mediante el Decreto
Presidencial No 1152 del 09 de Julio de 1968.
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